El 20 de marzo de 1954, en Sucesos Sensacionales, legendario semanario de crónica roja, se publicó el primer Diccionario del hampa de Medellín. Allí, en una de sus últimas entradas, los medellinenses de bien conocieron la palabra “Trabado”, cuyo significado era este: “Estar bajo los efectos de la mariguana”.
En esa época la variedad de mariguana más famosa de la ciudad era la zamoreña, que se cultivaba en las orillas del río Medellín, a lo ancho del barrio Zamora. Se vendía en Lovaina, Manrique, Aranjuez, La Bayadera, Barrio Antioquia, Fundadores y Guayabal, a un peso el cigarrillo.
La zamoreña, sin embargo, desapareció en 1959, cuando la policía arrancó 3040 matas y la canalización del río Medellín hizo imposible retomar su cultivo en ese sector.
Para entonces, según el decreto nacional 0014, los mariguaneros eran considerados como maleantes y se les reprimía con penas de 2 a 6 años de prisión. El primer medellinense al que se le aplicó ese decreto fue Daniel López, alias El Mal Oso, en julio de 1955.
Dos años después, en septiembre de 1957, en un artículo titulado “La mariguana se consume libremente en la ciudad”, publicado por Sucesos Sensacionales, aparecieron las primeras palabras hechas en Medellín para denominar a la mariguana, esto es, “Chicharra”, “Quenqué” y “Pito”.
Tan libremente se consumía la mariguana en la ciudad que, dos años más tarde, en agosto de 1959, el periódico Opinión denunció que no solo la fumaban los marginales, sino también las hijas de papi y mami. El artículo, titulado “Señoritas de alta sociedad fumadoras de mariguana”, señalaba que las niñas de bien de Envigado y El Poblado usaban regularmente la “yerba maldita”. Entre ellas la llamaban “Grifa”, y al acto de fumarla lo nombraban con este eufemismo: “Darse el toque”.
Finalmente, dos años después, en julio 1961, en un artículo titulado “Niños de corta edad y muchachas sencillas consumen la mariguana”, publicado por el mencionado semanario de crónica roja, salieron a la luz por primera vez en la prensa local las que hoy en día son las palabras más populares para referirse a la mariguana y a sus cigarrillos en Medellín, a saber: “Bareta y Bareto”.
Texto por JFR
